no busco violencia, sólo me revelo ante lo que veo y no me gusta. cada día intento realizar mis tareas encomendadas, las necesarias para seguir adelante.
cuando llega el momento, la situación que la que hay que decidir, el primero que contesta soy yo mismo.
debato conmigo mi vida, no hay nadie en el mundo, probablemente, que me conozca mejor que yo: eso tiene que ser ventajoso. debido a lo cual, mis palabras suelen salir fluidas, ya que estan previamente medidas y calculadas; cuando algo sale mal no es una sorpresa, desgraciadamente.
tantas cosas me han salido mal y me saldrán, que tiempo tengo de encontrar mis virtudes y explotarlas antes de que sea demasiado tarde. para esta ardua tarea, la rutina es un buen escudo.
no lo olvideis amigos/as, la vida no es más que un compendio de historias que acaban por formar la tuya propia, de principio a fin; solo tú tienes la capacidad de cambiar el argumento: ¡hazlo!
( contra el sinsabor, un acto de vil consumismo: comprar )